Seguidores

lunes, 12 de septiembre de 2011

Media Maratón de Soria 2011 Crónica y Clasificación




Este que aparece en la foto mirando de reojo, como si le hubieran pillado tomándose un whisky en vaso de plástico es mi primo Alberto que tuvo el mérito de acabar con el gemelo maltrecho. Y dice que piensa volver.

Menuda carrera la media maratón de Soria.  Menos mal que no me la perdí porque esta es de las carreras que recordaré durante mucho tiempo.  Es una carrera a la que le han cambiado, entre otras cosas el recorrido y esta era mi primera participación y yo iluso de mi  pensé que el cambio había pasado de duro a menos duro. Parece que no es así, parece que la cosa ha ido a más.

Salimos 289 carreristas a las seis en punto de la tarde del campo de Los Pajaritos a 30º. Sí, no me he equivocado, Soria, Septiembre, seis de la tarde 30º. Y menos mal que hace un mes decidieron retrasar una hora la salida. Se sale sobre pista de atletismo en perfecto estado y nos encaminamos sin pérdida de tiempo al centro de la ciudad y al parque de la Dehesa. Mucho público animando. A esas horas de la tarde se juntas las familias que van al parque, los que salen de comer de los banquetes de bodas y los abuelos que están suelen estar por allí todo el año. En el kilómetro cinco se encuentra el primer avituallamiento. Observo una mesa llena de vasos y una fila de esponjas. Cojo el primer vaso me lo echo por la cabeza, porque de calor iba sobrado, sigo corriendo, saludo a la familia  y me da tiempo a coger otro vaso de agua del que solo quedaba la mitad.  Seguí corriendo porque era el kilómetro cinco y apliqué la técnica de apretarlo por la embocadura y beber por un lado…. Pero el vaso era rígido y casi todo el contenido fue al suelo.




Continuamos por San Andrés y García Solier hacia la estación de autobuses  zigzagueando por las calles con tendencia a subir, pero con sus correspondientes bajadas. Mucho público, mucha animación. Lo que se llama un  rompepiernas. En el kilómetro 10 vuelta al avituallamiento de vasos rígidos y de esponjas. A la vez vasos y esponjas, no da tiempo a todo. Todavía me resisto a parar para beber, sigo corriendo. Bebo un vaso casi lleno, me echo otro por la cabeza, cojo una esponja, ¿Para qué si parezco una rana? .

Los siguiente kilómetros transcurrieron por la Barriada, que es un conjunto de casas de planta baja con trazado rectangular donde se entra en una calle para salir en otra en distancia de no más de doscientos metros. Una curva, otra curva, otra. Dado el escaso número de carreristas, había tramos en los que me  encontraba solo en la calle y como guía  una flecha en el suelo que indicaba la siguiente vuelta o un voluntario, de los muchos voluntarios,  situado en medio de la calle con una señal de tráfico en la mano que indicaba el camino a seguir. Flecha para los carreristas,  señal de prohibido para los vehículos motorizados.



Recién salido de la Barriada, pero con indicios anteriores, comienzo a notar una sequedad en la boca fuera de lo normal. Me costaba hasta mover, hasta chascar la lengua.¿Me estaré deshidratando? No tenía mareos, ni veía visiones, espero no verlos nunca,  pero los indicios me parecieron claros.  Seguía el rompepiernas. Veo a un carrerista parado  y bebiendo agua de una botella que le había dado una persona del público. Estaba claro lo que debía hacer. Ha toda familia que veía, con niños, sin niños, abuelas, les pedía agua, una botella, lo que tuvieran. Necesitaba beber agua antes del avituallamiento del kilómetro quince, que no llegaba, que dudaba de poder alcanzar. Me encontré con una señora y dos botellas en su mano izquierda. ‘¿Señora, me puede dar agua?’ ‘Hay, lo siento, no puedo, son para mis  nietos’. Recuerdo que solté un juramento y una voz detrás que decía, ‘Señora escóndalas que se las van a seguir pidiendo’. Este es uno de los hechos más tremendos que me han ocurrido en una carrera. Cómo doscientos metros más adelante hice casi una petición pública a la afición que se encontraba allí y en esta ocasión  un alma caritativa, hasta con una sonrisa, me dio la botella y hasta se disculpó por no tener más. ¡Es duro esto de pedir! .

Acto seguido cuestarrón que no tenía procesado, la de la calle Merineros y un poco más allá el avituallamiento del kilómetro quince. Esta vez si, esta vez, me paré, cayeron dos vasos de agua y otro por la cabeza, pero tranquilamente. Sin correr. Y seguí … Según mís cálculos, de ahí hasta el final la tendencia era claramente hacia abajo.  Desde Santo Domingo hasta el kilómetro diecinueve hay tres kilómetros casi de caída libre. A la altura de la calle Santo Tomé, coches en movimiento por la calzada en perfecta comunión, un carrerista, seguido de algún que otro coche  y así. Los de la organización estaban por todas  las esquinas pero de vez en cuando se escapaba algún conductor al que le podían los nervios.




Se llega a la ribera del Duero siguiendo el Paseo de San Prudencio donde estaban mis tíos Jaime y Puri animando y donde un poco más allá comenzaba el final de carrera más bestia que he sufrido en una media. Es alrededor de un kilómetro y medio de subida en tres tramos, el último de los cuales de unos cuatrocientos metros y fuerte desnivel me dejó a punto de claudicar pero el pensar que en la última curva estaba la familia esperando me dio fuerzas para terminar y tumbarme en la hierba del campo de fútbol que es lo que hice nada más cruzar el arco de meta.

Es la media con más animación de público de todas las que he corrido y es de agradecer a la organización el reto que se han planteado de mejorar la carrera actualizándola a los tiempos que corren. El mayor de todos, el plantear una carrera que prácticamente paraliza la ciudad, ya que pasa por todo Soria durante más de dos horas con la dificultad que eso conlleva. En gran medida eso se consiguió aunque hay cosas que mejorar, comenzando por lo más sencillo. Dar botellas de agua en lugar de vasos que hay que andar llenado y luego no da tiempo a beber y luego viene lo de tener visiones.



Independientemente de la temperatura esta es una carrera muy dura, más de lo que pensaba, con bastante cuestas cortas pero muy pronunciadas y otras largas y más tolerables. Decir que llegamos 240 carrerista de  los 289 iniciales, que el tiempo del ganador Nacho Cáceres fue de 1h 13’ y el de la ganadora Dolores Pulido fue de 1h 27’, que el tiempo del corredor que quedó en la posición 120 o sea en la mitad de la carrera fue de 1h 49’ (cuando lo normal en una carrera con este número de corredores viene a estar entre 1h 35’ – 1h 40’ ) y que yo llegué en 1h 52’ y me doy más que satisfecho.

Para todos aquellos amantes de las emociones fuertes, al año que viene se repite la experiencia.

Quiero dar las gracias a Antonio, Alberto y  Goyo a sus familias y toda la gente con la que tuve oportunidad de compartir un rato que no voy a olvidar fácilmente.

Clasificaciones pinchando aquí.

19 comentarios:

  1. A mayor sufrimiento mayor satisfacción.
    Enhorabuena por la carrera.
    Saludos!

    ResponderEliminar
  2. Está claro que es dura, con o sin calor. Pero estas carreras te endurecen ahora para luego alcanzar tu objetivo primario. Enhorabuena.

    ResponderEliminar
  3. Jooooooer, que crónica, me has tenido en vilo todo el rato, no he arrancado a sudar de casualidad, Enhorabuena por la carrera y sobre todo por como dices al final, darte por satisfecho por el trabajo realizado, eso y disfrutar es lo realmente importante. Lo del agua una faena... leyendote se me secaba la garganta jejejeje, te comprendo perfectamente, en alguna ocasion he padecido la sed y es muy muy desagradable la sensación, con decirte que me planteé recoger una botella del suelo y beberla....

    Un abrazo compi,

    ResponderEliminar
  4. Quedarse con ganas de más, denota lo que has disfrutado.
    Enhorabuena.
    Soria 6 de la tarde 30ºc, ¡qué fuerte!

    ResponderEliminar
  5. Ya tuvo que ser dura de verdad, pero como dice gonzalo nos vale para otras vastantes mas llevaderas,saludos

    ResponderEliminar
  6. Correr una media en Soria a 30ºC! qué pasada!
    Enhorabuena! qué fuerte eres!
    bss
    Tania

    ResponderEliminar
  7. Ay payo, que mal se pasa tiniendo que pedil agua. Habel-la robao. Cojone

    ResponderEliminar
  8. Es que 30º son 30º en Soria o en Sevilla, felicidades.

    ResponderEliminar
  9. - Me da agua, me da agua?

    - Y un huevo majete. Pa´mis nietos. Tu haberte quedado en casa.


    Jejeje, maja la señora. La proxima vez como dice gaceladevallecas, se las mangas y que corra detras de ti.

    Gran prueba con la dureza de cuestas, calor. Enhorabuena.

    ResponderEliminar
  10. Pedazo de crónica para una carrera que parece dura de narices. Te felicito por tu saber estar, yo le hubiera arrancado esa botella a la señora, cual delincuente juvenil (bueno, solo delincuente). Enhorabuena socio.

    Un saludo

    ResponderEliminar
  11. Completisima cronica, y muy buena marca para una média a 30º. Felicidades, se nota que la has disfrutado a tope.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  12. Una media rompepiernas siempre es dura, y si a eso se le añade el calor, pues me pongo en tu lugar; enhorabuena por ese tiempo y por saber sufrir, es para estar satisfecho.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  13. Felicidades por un tiempo más que decente en una carrera tan dura.

    ResponderEliminar
  14. Mi buen Jaal, me imagine a la viejecita con las botellas de agua para los nietos, je je je!!!
    No pues esta canijo correr a altas temperaturas pero al final, una experiencia mas.
    Felicitaciones y un abrazo campeon!!!

    ResponderEliminar
  15. Impresionante crónica. Y gran victoria contra todos los elementos. Seguro que estás muy satisfecho. No quiero pensar cuánto sufriste, con lo que me has hecho sufrir aquí a mi...
    ¿Quién me iba a decir a mi que se pasaba ese calor en Soria?...

    ResponderEliminar
  16. si es que hacía un calorazo por soria el sábado que me daba miedo solo pensarlo... pero te salió una buena carrera, por un recorrido duro que te cagas, y encima a 30 graditos...

    Y una semana antes en el Burgo estábamos a 15 grados a esas horas, el tiempo está loco

    estás hecho una fiera.

    ResponderEliminar
  17. Pues sí que parece durilla. En medio de la lectura hasta yo me tuve que levantar a cojer un vaso de agua... y pensé en ti. ;)

    ResponderEliminar
  18. Hola Jaal,
    Muy buena crónica, durísima carrera y qué calor !!!
    Correr con calor no me gusta nada y menos cuando falta la hidratación....
    Felicitaciones por tan dura carrera que has sabido sobreponerte y para la próxima ya tienes más experiencia con el calor.

    Un abrazo.
    gustavo.

    ResponderEliminar
  19. También con mucho retraso, enhorabuena por la media de Soria, vaya manera de pasar sed y ojalá que no se repita lo del agua para futuras ediciones (muy buena la crónica).

    ResponderEliminar